Visto el sectarismo de algunos
políticos contemporáneos, como los que ocupan - pese a perder las elecciones y
no representar más que a una minoría radical – el gobierno municipal de Madrid, no puede cabernos duda si Jesus Fueyo , como muchos otros grandes
intelectuales y artistas del siglo XX en España , hubiera sido recordado con
algún acto público , éste sería retirado, censurado, borrado y apartado, en
aras de la lamentable Ley de Memoria histórica . Y todo ello aunque como bien dicta el sentido no se pueda
legislar la memoria, y por fortuna, no se puedan borrar la huella del pensamiento y del arte,
por más que algunos aprendices totalitarios lo deseen e intenten.
Pensador y
político
Jesús Florentino Fueyo Álvarez nació en La Felguera el 22
de febrero de 1922 y falleció en Madrid el 12 de junio de 1993 a los 71
años Se
licenció en la Facultad de Derecho de la entonces Universidad Central de
Madrid, hoy Universidad Complutense de Madrid, doctorándose con la máxima
calificación con una sugerente tesis sobre
Alexis de Tocqueville y la
Estructura de la Sociedad Democrática. Por aquél entonces ejercían como docentes en la facultad, Javier Conde, que influyó mucho en
él, y Carlos Ollero, que iniciaba su carrera docente Ya en 1947 con apenas 25
años, ganó la oposición a Letrado del Consejo de Estado y en 1955 logró acceder a la cátedra de Derecho político de Santiago . Sus cargos políticos fueron intensos y
frecuentes: Director del Instituto de Estudios Políticos durante los
periodos 1962/69 y 1974/77. Consejero Nacional del Movimiento desde 1967 y
procurador en Cortes entre 1964 y 1977. Pese
a su carácter intelectual Fueyo gustaba de la política entendida de la forma
aristotélica de hacer cosas, por ello no le importó intentar la carrera en este
mundo resbaladizo y proceloso. Hubiera llegado a ministro de haber vivido en
otro período, tal vez unos años antes cuando sus compañeros y mentores poseían
más influencia en el régimen. Nunca lo consiguió pero supo servir con fidelidad
y lealtad a sus superiores sin abandonar nunca su independencia intelectual.
Además
en 1981 ingresó en la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas en
la que permanecería hasta su muerte. Su vacante fue cubierta por Rodrigo
Fernández-Carvajal el 18 de enero de 1994.
Colaboró en diarios y revistas y publicó obras
densas e interesantes como La época insegura Esquema de la subversión de nuestro
tiempo, Pueblo y Estado, Desarrollo
político y orden constitucional, La mentalidad moderna, Humanismo cristiano y humanismo marxista. Pero
su obra emblemática, apenas conocida hoy, es de 1973 La vuelta de los Budas.
Jesus Fueyo tuvo
relación directa con personalidades de la época como Utrera Molina, Gonzalo
Fernández de la Mora , Adolfo Muñoz Alonso , Girón de Velasco, Raimundo
Fernández Cuesta , Pilar Primo de Rivera o Juan Velarde Fuertes. Y fuera
de España nada menos que con el gran pensador Carl Schmitt (puede verse en el enlace: http://www.academia.edu/10696128/Una_parte_de_la_correspondencia_entre_Carl_Schmitt_y_Jes%C3%BAs_Fueyo_1962-1967.
Fueyo se convertiría en uno de los principales
interlocutores españoles del controvertido intelectual germano.
Con Fernández de la Mora (1924-2002) , uno de los más
brillantes intelectuales del período mantuvo correspondencia y amistad ( se
puede consultar en : http://www.mcu.es/ccbae/va/consulta/resultados_navegacion.cmd?posicion=7&forma=ficha&id=2839509 )
Y De la Mora no dudó en contar con él en los momentos de la fundación de la revista
de pensamiento Razón Española En el consejo de redacción, aparecía Fernández de la Mora
como presidente; y los
demás miembros eran Ricardo de la Cierva, José Luis Comellas, Manuel Fernández
Galiano, Jesús Fueyo, José García Nieto, Vintila Horia, Juan José López Ibor,
Carmen Llorca, Antonio Millán Puelles, Alberto Navarro, Francisco Puy, Luis
Suárez y Juan Velarde. Sin duda una relación de intelectuales de gran categoría
que al igual que casi todos los de su generación, la anterior y las posteriores
han sufrido la incomprensión. El
desconocimiento de la gran aportación de los intelectuales conservadores se
debe no solo a la saña y a la acción destructora de la izquierda política sino
a la desidia intelectual de la derecha contemporánea que parece haber olvidado
– literalmente – sus raíces. Como señalaba Jerónimo Molina el desvarío centrista
ha llevado a una especie de adanismo que
se empeña en iniciar la historia poco menos que desde los años ochenta , como
si antes no se hubiera pensado, escrito o simplemente vivido . Como nos recuerda el citado Jerónimo Molina (es revelador el artículo http://www.academia.edu/18745998/Jes%C3%BAs_Fueyo
)
“La generación de juristas e historiadores
políticos que surge tras la guerra civil en torno a instituciones como el Instituto de Estudios Políticos,
actual Centro de Estudios Constitucionales, dejaron un legado de pensamiento
político que no ha tenido la continuidad deseable, ni hasta ahora se ha
producido una filosofía política o jurídica con el nivel suficiente para ser
comparable, tanto en profundidad como en rigor y extensión. Algunos de estos
juristas e historiadores, cuya obra publicada en su mayor parte transcurre en
el periodo referido, son: Javier
Conde Manuel García Pelayo, Luis Sánchez Agesta,
Carlos Ollero, José Antonio Maravall,
Luis Díez del Corral. Alvaro
d´Ors, Jesús Fueyo, Gonzalo Fernández de la Mora, Nicolás Ramiro Rico,
Francisco Murillo Ferrol, Enrique Gómez Arboleya, Antonio Truyoll, y el más
joven de ellos, Dalmacio Negro Pavón “.
Si
quisiéramos establecer un eje común entre ellos, podría ser el del realismo,
dentro de un marco cristiano que se une con el otro gran eje que es la
formación jurídica, el Derecho. Entre
estos juristas e historiadores políticos, destaca sin duda la figura de Jesús Fueyo .
Dalmacio
Negro ha contado en alguna ocasión el prestigio del que gozaba Fueyo entre sus
colegas más notorios: “Si eso lo ha dicho Fueyo, es que
es asi
La justicia y la técnica la acción y el pensamiento, fueron
preocupaciones del autor en una época como la suya en la que los cambios
trascendentales se oteaban en el horizonte
Fueyo y la sucesión
Jesus Fueyo se adscribe a la intelectualidad
de la Falange en su segunda generación,
lejanos ya los tiempos de la Corte Literaria de Jose Antonio Primo de Rivera,y
con un matiz filosófico y jurídico que en Fueyo adquiere una profunda carta de
naturaleza . Como tantos otros de su generación hubo de enfrentarse a la
desvirtuación de los principios originarios falangistas diluidos en ese
Movimiento Nacional capaz de diversas y
aún opuestas singladuras Fueyo , como
antes hemos apuntado, no alcanzó un Ministerio y su reciedumbre intelectual y
política se antojó excesivamente compleja para dar el salto a la máxima
política justo en el filo de los años setenta cuando el Régimen de Franco
parecía envejecer junto a su máximo artífice .
Veamos lo que Jesús Fueyo pensaba del proceso político abierto en 1969
con el nombramiento de Juan Carlos de Borbón como sucesor de Franco preparando
así la instauración de la monarquía. ( la entrevista integra en http://www.march.es/ceacs/biblioteca/proyectos/linz/documento.asp?reg=r-74288
)
Comienza
señalando que la apertura inmediata de un proceso constitucional crearía un
enorme vacío político Y defiende que no
se puede aceptar el cambio por el cambio. En qué ha de consistir ese cambio –
se pregunta el autor – añadiendo “ si se pretende liquidar un sistema que
lleva cuarenta años de vigencia, se va a encontrar unas resistencias que sólo
podrían ser vencidas por un proceso revolucionario, que no creo que tenga una
base sociológica suficiente en el país. En segundo lugar, la convergencia de un
contexto institucional hace que el cambio sea, en algunos aspectos, ágil, y, en
otros, contenido. Finalmente, el cambio engendra el cambio. El cambio no es un
movimiento epiléptico, sino una estrategia
“
Pero
aún más interesantes y reveladoras son
sus respuestas ante el posible futuro político español con la designación a
título de rey del sucesor de Franco en la Jefatura del Estado.
LA
SUCESIÓN Y SUS PROPIAS POSIBILIDADES
-¿Su postura en este caso?
—Mi opinión concreta es
que la convergencia en este momento de la razonable proximidad del hecho sucesorio,
con una dinámica social y económica, y la dislocación del equilibrio de fuerzas
en la política Internacional no hacen razonable acelerar la revisión
constitucional. Creo que hay que darle al futuro de la sucesión sus propias
posibilidades políticas.
—Pero
esto no llevaría consigo una pesada carga sobre las espaldas del futuro Rey?
—Nunca he sido de esa
opinión. De todas maneras, la sustitución del Jefe del Estado, de una figura
como la de Franco, es de por si un cambio histórico de una magnitud muy seria,
pero es que yo me temo que la apertura inmediata de un proceso constitucional,
desde la situación actual, o sería un «diktat», lo que le privaría de esa
legitimación democrática, aunque hubiera un referéndum, o si se abría el tema
en toda su intensidad creo que se produciría un corte en el hecho sucesorio de
tal manera que nos encontraríamos con que el Estado´ vigente se vería
moralmente dimitido mientras que el Estado, en proceso de creación, no habría
nacido todavía, lo cual nos llevaría a un tremendo vacío político.
—Hace unos días declaraba el ex
ministro señor Garicano Goñi, que veríamos los partidos políticos.
—Eso depende de la
visión de cada político. La mía, respecto a la de Garicano difiere, quizá por
causa de las dioptrías.
NUESTRA
VIA A LA DEMOCRACIA
—También
se ha escrito que nos encontramos en una ceremonia de la confusión.
—Eso es una frase como
alguna de las que yo mismo he hecho. Nuestra situación actual, como le decía, es
el producto de una convergencia de situaciones conflictivas. Hoy mismo leía el
ataque de Cunhal a la social democracia, que cataloga como avanzadilla del
capitalismo, cuando en España se toma como panacea.
—Sin llegar a la ruptura, ¿hay
posibilidad de que nuestro sistema sea de algún modo homologable con el de los
países europeos?
— Todavía no he
encontrado ningún trabajo en el que se me diga qué va a pasar con las Monarquías
europeas. He leído que Giscard pretende ser el primer presidente de Europa, y
no sé cuál va a ser el papel de una Monarquía como la inglesa en esa Europa que
se pretende. De la misma forma que el Partido Comunista parece —parece—
respetar las peculiaridades de cada país que quiera implantarlo, Europa tendrá
que hacer lo mismo respecto a las vías hacia la democracia de sus países
miembros.
—Cuál sería su diagnóstico para el
futuro?
—Creo que si España sale
del proceso sucesorio en forma y unida, este país puede encontrar esa vía sin traumatismos
de gran alcance constitucional. Lo peor que nos puede ocurrir es justamente lo
contrario que a los portugueses. Ellos han hecho una revolución diciendo que un
pueblo unido jamás será vencido, y aquí se podría decir que un pueblo desunido
será siempre vencido“.
LA
VUELTA DE LOS BUDAS
Este libro original se edita en 1973 por Sala Editorial.
Se vive un momento bastante agitado de
la vida política española, que se planteaba el fin del régimen como
consecuencia de la edad de su fundador, y sus posibilidades de evolución y
transformación. Carrero Blanco es desde junio de 1973 el Presidente del
Gobierno guardando Franco la Jefatura del Estado Pero el 20 de diciembre de ese mismo año
Carrero es asesinado. El propio Franco, ya con 81 años reconocería que había
quedado sesgada la última ligazón que le quedaba con el mundo.
La Universidad, masificada desde hacía pocos
años, vivía un ambiente agitado y ya muy infectado por ideas de raíces marxistas, especialmente
en la facultad donde Fueyo ejercía como profesor. En Estados Unidos Nixon se
enfrenta al calvario Watergate que acabaría con su Presidencia Juan Domingo Perón deja su estancia española
también en 1973 tras arrasar en las elecciones presidenciales argentinas Se despide de Franco y marcha hacia su país
donde moriría meses después, en julio 1974 dejando a la Argentina en una
dramática situación de inestabilidad
La Vuelta de los Budas no obtuvo la resonancia que su autor hubiera
deseado Tan solo
dos reseñas le hicieron justicia una en las páginas del diario ABC, escrita por
José María Ruiz Gallardón, y otra, de José María Nin de Cardona, director de la
editorial que publica el libro, en la revista del Instituto de Estudios
Políticos. Nunca se ha reeditado posteriormente.
El
autor subtitula su libro como ensayo ficción sobre la última
historia del pensamiento y de la política , avisando al lector en una nota entre las páginas del libro, que
el contenido se balancea nada menos que
en un juego peligroso al filo de la navaja de la realidad . Sin duda toda una
provocación intelectual poco usual en el panorama del pensamiento de cualquier
etapa
La originalidad del libro nace de su
concepción casi novelesca Más que un
ensayo convencional es una meditación que transita por las dimensiones más
oscuras de siglos de especulación filosófica y del pensamiento político. Y junto a las palabras se alternan los mitos,
las profecías, el esoterismo, las
herejías apocalípticas, las sabidurías oraculares, las utopías, los atavismos,
los enigmas cabalísticos, las alquimia En Fueyo la herencia de Ortega, D,Ors ,
Unamuno y Marías se ha teñido de especulación intelectual, de los nuevos
bárbaros de Raymond Aron, y desde luego no ha desdeñado las aportaciones de
Julius Evola, Karl Jaspers . Louis Pauwels y
Vintila Horia .
Con
estos ingredientes, Fueyo conduce al lector con maestría, conocimientos
sólidos, humor, ironía y un gran estilo en un esfuerzo monumental de casi seiscientas
páginas sin respiro.
Además Fueyo introduce un personaje ficticio,
como si de una novela se tratara Es Herr Professor Gottlieb Erlöser Panaceo,
Salvador Curalotodo Amado de Dios, según traducción de Dalmacio Negro. El
personaje es el arquetipo de pensador agnóstico característico de nuestro
tiempo Un pensador sin raíces,
desencarnado de la visión ontológica del mundo
inmerso en el nihilismo y en la decadencia de la metafísica: aún
quedaban unos pocos años para el pensamiento débil de Vattimo, la posmodernidad
o la plaga de la corrección política .
Un
estudio sobre el libro completo se encuentra en los enlaces: https://seminariopensamiento.wordpress.com/2014/04/14/jesus-fueyo-la-vuelta-de-los-budas-1a-parte/
https://seminariopensamiento.wordpress.com/2014/04/21/jesus-fueyo-la-vuelta-de-los-budas-2a-parte/
Fueyo desgrana una tesis sobre
el origen de la cierta decadencia intelectual de Occidente ya descrita por
Oswald Spengler décadas antes : “ la
patogenia invasiva y recurrente de las esencias búdicas y extractos
zoroastrianos, que desde el arcaico culto gnóstico de Manes o Mani, rebrotan en
la inteligencia occidental bajo la forma de diferentes herejías –bogomilistas,
cátaros, albigenses, patarinos, publicanos y otros perfecti-,
difundiendo con mística sublime la agonía inminente del mundo y su inutilidad,
su mensaje consolador de negación y renuncia, frente a la cultura de la
voluntad y de la creación de humanidad característica de occidente “. Es decir, la apatía, la debilidad la renuncia a la excelencia y a los valores
constituyen el camino más corto hacia una irremisible decadencia
Hay espacio
para la meditación sobre Europa con una sugestiva radiografía
del alma cultural de las grandes naciones europeas: Alemania, Inglaterra,
Francia.
“Si el cristianismo liberó a la
persona de su cosificación, mediante la postulación inderogable de tratar y ser
tratado conforme a su naturaleza y no a la Naturaleza, es decir conforme a lo
que exige aquél desenlace escatológico, que es el destino más grande y trágico
del hombre redimido, el empeño occidental del nihilismo y sus veneros
intelectuales trabajan para la catástrofe del segundo budismo anunciado por Nietzsche “
.De este modo la vuelta de los Budas anuncia la gran amenaza para
Occidente , desgarrado por la crisis de las ideas, los nacionalismos
periféricos y la ausencia de una personalidad suficiente para debatir con
los gigantes ruso y americano . Y esta
amenaza sería la sustitución progresiva de la identidad cristiana por otras
identidades de las cuales esos Budas del título son su inquietante metáfora.
Su diagnóstico respira una profunda
actualidad Si los acontecimientos siguen caminando por la vía del nihilismo, en
lugar de rescatar el genuino impulso metafísico del que surgió Europa, que no
es otro que la Cristiandad, el futuro será sombrío
El
comunismo se analiza como herejía del
cristianismo. Marx invierte este mito colectivizando el yo, disuelto en
inteligencia colectiva y dialéctica social. . La metafísica inmanente de la
naturaleza del materialismo dialéctico, conecta con las esencias de las
filosofías orientales, en estos dos giros sobre el conocimiento (Verdad) y el
sujeto (Libertad). Según
Fueyo, la autocrítica masoquista de Europa, tendrá su hora también en
Norteamérica. “El trabajo norteamericano está guiado por la vocación de modelar para
el bienestar del hombre, la creación divina “. De haber alcanzado a vivir en el nuevo milenio hubiera sido sin duda
apasionante leer las reflexiones del autor sobre la caída del comunismo , la
nueva Rusia, la Unión Europea tantas veces vacilante, la eclosión económica de
China, la amenaza islámica o el papel siempre preponderante pero complejo de
los Estados Unidos en el tablero mundial . Fueyo, en el contexto de los
agitados años 60 y 70 del pasado siglo se mostraba pesimista con la evolución que el pensamiento parecía apuntar en el inmediato futuro Así sucedería en buena medida con la eclosión
casi inmediata del llamado pensamiento débil, el estructuralismo y el reinado
de la corrección política que a menudo degenera en un pensamiento único y voraz
Y en España el problema presentaba idénticas o
tal vez más pronunciadas sombras. En sus reflexiones Jesus Fueyo
veía que el sentido de todo lo ocurrido durante la Transición era que se había
tratado simplemente de insertar a España en una posición subordinada a la hegemonía total
norteamericana Es interesante releer los
recuerdos del ex ministro Jose Utrera Molina (Sin cambiar de bandera) que cita a nuestro autor en varias ocasiones recordando las
dificultades que tuvo para nombrarle Director del Instituto de Estudios
Políticos en 1974. Utrera era entonces el Ministro Secretario General del
Movimiento y el distanciamiento con el que le trataba el Presidente Carlos
Arias Navarro le amargaba de forma dramática el día a día de su trabajo Pocos meses después Utrera sería cesado de
forma abrupta El ex ministro
consideró siempre a Fueyo como un leal y brillante colaborador
intelectual que trataba de otorgar
solidez y futuro al Régimen Político que servía pero que ya preparaba un cambio
de rumbo propiciado en buena medida por sus dirigentes. En palabras de Fueyo
tuvo lugar la célebre respuesta a la
pregunta “Y después de Franco ¿qué ¿ “
. Que no era otra que “las instituciones
“
Descubrir hoy a Jesús Fueyo, apartar – si
acaso – la hojarasca circunstancial de lo que no responda a la orteguiana
altura de los tiempos, y navegar en las páginas atrevidas de su peculiar
regreso de los Budas constituye sin duda un notable ejercicio de
libertad intelectual y de saludable incorrección política.
Más que "empapado", sumergido en el conocimiento de la vida y obra de Fueyo, Fernando Alonso Barahona aborda el tema de manera impactante - baste el párrafo de introducción con el que nos equipa a dar una mirada comprehensible a tan controvertido tema. Soberbias letras con el lustre del idioma castellano que nos dan la perspectiva clara de este contenido. Felicitaciones, Fernando.
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