“ En San Sebastián hice una función en el teatro, y cuando salí en el primer mutis y me aplaudieron, vi un destello, un relámpago que me inundó, y una voz me dijo: 'Tú tienes que ser cómico' “
ALFREDO LANDA . (Alfredo el Grande . La vida de un cómico ) .
La muerte de Alfredo Landa (
3 marzo 1933- 9 mayo 2013 ) deja de nuevo en soledad a cine español en unos
meses trágicos en los que también han desaparecido grandes como José Sancho, Sara Montiel, Fernando
Guillén, Aurora Bautista , Carlos Larrañaga
o Juan Luis Galiardo .
Alfredo Landa - nacido en
Pamplona y Areta de segundo apellido como el detective al que daría vida en El
crack - protagonizó varias décadas del cine español y como escribiera con agudeza
Berlanga pocos actores en la historia del cine han sido capaces de crear un
subgénero con su propio nombre, en este caso “el landismo “ . Y precisamente
ese punto de gloria del que el propio Landa se enorgullecía se ha convertido en
un obstáculo para su reconocimiento unánime a la hora de enjuiciar su trabajo
profesional .
El “landismo “ ha sido odiado por la crítica cinematográfica casi en bloque , pero como ha recordado Manuel Hidalgo , el menosprecio actual no es comparable a la auténtica saña con que fue recibido en los momentos de su apogeo por la misma crítica ( los antecesores de la misma ) y los jóvenes cineastas de aquel momento que aspiraban a hacer un cine personal o de autor .
El tiempo , casi siempre juez sabio, suele poner las cosas en su sitio . El landismo, es decir las películas de comedia autóctona , gruesas y castizas que Landa – como José Luis López Vázquez , Manolo Gómez Bur y tantos otros protagonizaron en los ultimos años sesenta y primeros setenta – hizo a las órdenes de Mariano Ozores, Pedro Lazaga o Ramon Fernández , no pasarán desde luego a la historia del séptimo arte . Hasta ahí no hay duda, sin embargo es muy aventurado anular por completo su valor . Y no solo desde el punto de vista sociológico sino desde la óptica del mero divertimento . Puede que esa visión de Landa corriendo en paños menores detrás de rubias despampanantes no resulte demasiado presentable, pero algo en aquellas películas ha pervivido o al menos ha reflejado de nuestros propios demonios, cuando décadas después los índices de audiencia de las distintas televisiones o la venta de DVD aumentan cuando se emiten títulos como Cuatro noches de boda, entrañable comedia de Mariano Ozores con Concha Velasco, Antonio Ozores y una retahíla de inolvidables secundarios , Cuarenta grados a la sombra , Jenaro el de los 14, LA graduada,- con una espléndida Lina Morgan - El reprimido, Vente a Alemania Pepe ( título premonitorio por cierto, una de losmejores del ciclo que dirigiera Lazaga ) , película que hoy triunfa en las audiencias como el día de su estreno o El alcalde y la política de Ozores , también de morbosa actualidad .
Y ello sin olvidar el inmenso fenómeno
de taquilla que supuso No desearás al
vecino del quinto, 1970 de Ramón Fernández disparatada comedia que aún hoy
provoca risas tal vez culpables pero risas al fin y al cabo .
Mariano Ozores , uno de los artífices del landismo , escribió en sus
desternillantes memorias :
“Para
tener el apoyo oficial en los años sesenta había que ser de izquierdas . Y yo
no era de nada . Ahora, décadas después hay que seguir siendo de izquierdas . y
yo sigo siendo de nada “ .
Claro que la miopía de la industria oficial y
la crítica tampoco valoraron empeños del calibre de Los ojos perdidos, bello film romántico de Rafael García Serrano, EL salario del crimen, espléndido
“thriller “ de Julio Buchs o la sardónica Verde
doncella , de Rafael Gil .
Y es que Berlanga – uno de los más grandes
- , Bardem , y Buñuel – otro gigante –
nunca estuvieron solos . No podemos olvidar a Rafael Gil – de quien acabamos de
recordar su centenario – José Luis Saenz de Heredia, Edgar Neville, Ladislao
Vajda , Manuel Summers , Mario Camús , Juan de Orduña , José María Forqué ,
José Antonio Nieves Conde, César Ardavín .....
Ninette
y un señor de Murcia ( 1965 ) fue una eficaz adaptación de
Miguel Mihura a cargo de Fernando Fernán Gómez . Años después Garci incluyó a
Landa en el reparto de la nueva versión de Ninette
, protagonizada por Elsa Pataky y Carlos Hipólito . Y fue en este rodaje
donde el autor de estas líneas tuvol el honor de conocer al gran actor .
Lamentablemente problemas de salud le obligaron a abandonar la película ( fue
sustituido por Fernando Delgado, otro ilustre veterano ) .
Y los títulos se agolpan, casi todos
muy populares incluso en la actualidad cuando se emiten en las televisiones o
en Cine de Barrio y sus secuelas . Así El
alma se serena , 1969 de Saenz de Heredia, No somos de piedra, 1967 de Summers , Soltera y madre en la vida, 1969 de Javier Aguirre . Y esencias
puras del “ landismo “ como Guapo
heredero, busca esposa, 1972 de Luis M. Delgado, París bien vale una moza , 1972 de Pedro Lazaga , El reprimido , 1973 – uno de los
emblemas del subgénero firmada por Mariano Ozores – o la curiosa Los pecados de
una chica casi decente , 1975 también de Ozores .
El padre de familia trabajador y
ahorrativo de Las verdes praderas que
descubre la inutilidad de tanto esfuerzo si se va desperdiciando la vida sin
disfrutar el día a día , o esas
profundas miradas , cansadas pero llenas de amor que componen esos dos
auténticos “ westerns” de sentimientos – como los definiera Garci – que son Canción de cuna e Historia de un beso . A su lado,
extraordinarias actrices jóvenes como Maribel Verdú , Amparo Larrañaga –
en la primera - y Beatriz Rico o Ana
Fernández en la segunda .
Alfredo Landa nunca protagonizó escándalos ;
orgulloso de su familia , de su mujer y sus hijos, creyente y al margen de
cualquier maniobra política fue capaz de concitar adhesiones diversas y lo que
es más importante que muchos españoles se sintieran identificados con su
personaje, con su sinceridad, con sus errores y defectos pero también virtudes
. No es flaco mérito para un actor que no precisó ser un galán o convertirse en
actor de carácter para llenar una pantalla . Sus gestos, su simpatía, su
carisma y una mirada entre ingenua y penetrante , siempre sincera , hicieron el
milagro .
"sólo hay media docena de señores con talento, que lo hacen
bien"- declaro sobre
el cine español contemporáneo explicando a continuación que el desencuentro con el público se debía a que "les damos morralla".
Muy bueno
ResponderEliminarExcelente
ResponderEliminar